El miércoles 9 y jueves 10 de octubre serán las II Jornadas de Neurociencias e Inteligencia Artificial 2024 “Conectando mentes: desafíos y oportunidades en IA y Neurociencias”.
Proyecto VIME ‘Ludoinclusión’ da inicio a sus actividades de 2024 con taller deportivo en colegio para personas con discapacidad intelectual
Encabezada por el profesor del Centro de Magisterio La Inmaculada de la Universidad de Granada (España), Dr. Manuel Ortiz Franco, la instancia permitió que niños, niñas, adolescentes y jóvenes tuvieran un acercamiento a los deportes de combate a través de juegos y dinámicas.
Un equipo de docentes y estudiantes de la carrera de Educación Física llevaron a cabo un taller enfocado en deportes de combate para escolares con discapacidad intelectual del Colegio Diferencial Alameda, ubicado en la comuna de Estación Central. Este constituyó la primera actividad anual enmarcada en el proyecto VIME ‘Ludoinclusión: programa de juegos motrices multicomponente para el desarrollo de la condición Física y capacidad funcional de escolares con discapacidad intelectual’.
La iniciativa, encabezado por el académico Claudio Farías Valenzuela, busca impactar de forma positiva en las capacidades funcionales de escolares con discapacidad intelectual a través de un programa de ejercicios que genere alta adherencia. Este fue adjudicado por el investigador durante 2023, quien ha trabajado en intervenciones similares desde 2018 en diferentes establecimientos educacionales.
La actividad, enfocada a niñas, niños y jóvenes de séptimo y octavo básico, como también a jóvenes que realizan el taller laboral dentro del Colegio, estuvo dirigida por Manuel Ortiz Franco, profesor de educación física y académico del Centro de Magisterio La Inmaculada de la Universidad de Granada (España), quien también es doctor en Innovación Docente y Formación del Profesorado, instructor de lucha libre olímpica y competidor en esta disciplina y otras como sambo (deporte de origen ruso similar a las artes marciales mixtas) y judo.
Mediante diversos juegos, el estudiantado del Colegio Diferencial Alameda pudo simular movimientos y técnicas aplicados en deportes como el boxeo, el karate y la lucha de una forma lúdica. “A través de este taller, apoyamos a los chicos para que tengan mayor autonomía y un alto grado de actividad física. Las actividades estuvieron planteadas para que puedan llevarlas después a su vida cotidiana”, señaló el Dr. Ortiz.
Inclusión y actividad física
El recinto en el que se desarrolló la actividad abrió sus puertas en 2022 y, a la fecha, acoge a 130 niños, niñas y jóvenes que tienen entre 6 y 26 años. Para la directora del establecimiento, Fabiola Silva Zenteno, este tipo de intervenciones “han ayudado a las y los chicos en el ámbito funcional y en su condición de salud”, a lo que se suma que les permite participar “en otras actividades que no sean lo pedagógico”, debido a las dificultades para este tipo de población de participar en otras instancias fuera del Colegio.
Dichas instancias se repetirán tanto en este como otros establecimientos ligados al proyecto VIME. Durante 2024, siguiendo la línea de consolidación de la iniciativa, se continuarán implementando “programas de entrenamiento basados en juego mediante diferentes metodologías, incorporando también el apoyo de un equipo de nutricionistas para medir el impacto de esta en la condición física, los parámetros nutricionales y la funcionalidad de las y los niños”, explicó Claudio Farías.
Además, añadió el investigador de la Escuela de Ciencias de la Actividad Física, el Deporte y la Salud (Eciades), el taller realizado en el Colegio Diferencial Alameda abre una línea de investigación emergente de la cual forman parte el académico Tomás Herrera Valenzuela y el profesor Manuel Ortiz. “Este proyecto abre muchas puertas para la Usach y la Universidad de Granada para seguir trabajando en la inclusión de este tipo de población, tanto en Chile como en España”, indicó este último.
El taller contó con el apoyo de cinco estudiantes de la carrera de Pedagogía en Educación Física de nuestra Facultad, quienes prestaron apoyo para el desarrollo de la actividad y monitoreando el desempeño del estudiantado al que estuvo dirigida. “Para la formación profesional, estas actividades son fundamental, ya que es importante vivir en carne propia cómo interactúan los niños, niñas y jóvenes con discapacidad” expresó Joaquín Hernández, quien cursa el tercer año del plan de estudios. “El deporte salva las vidas de las personas, sobre todo cuando se generan instancias como esta”, añadió.